Crowdfunding de personas: apoyando el talento
Un proyecto para sacar adelante la edición de un disco, una propuesta para producir un documental sobre las enfermedades raras, una petición para conseguir dinero y comprar un tractor en una granja ecológica… Existen muchísimas iniciativas en esto del crowdfunding, lo que muchos desconocen es que no sólo podemos invertir en proyectos, también en personas.
¿Qué es el crowdfunding de personas?
El crowdfunding de personas funciona exactamente igual que cualquier campaña de financiación colectiva. Su peculiaridad es que en lugar de invertir en cosas materiales, lo hacemos en personas, ya sea para financiar sus estudios, o para ayudarles a conseguir algo que por sí solos no serían capaces de obtener.
Este nuevo ámbito dentro de la financiación colectiva ha calado enormemente entre los estudiantes. El auge de las redes sociales, la falta de crédito y el alto precio de las carreras universitarias han sido claves para el desarrollo de este sector que cada día va consiguiendo más adeptos.
Los americanos son, como no, los pioneros en esto del crowdfunding de personas. También es cierto que no es algo que deba sorprendernos, ya que el precio medio que una matrícula universitaria en EE.UU es de unos 28.000 dólares (unos 21.000 euros).
Con este panorama, las vías para costearse los estudios eran dos: o bien ahorrar desde muy temprano, o bien solicitar un crédito al banco. La aparición del crowdfunding abre un nuevo camino en este sentido, y permite utilizar el patrocinio para asegurar el futuro de aquellos estudiantes que no pueden hacer frente a los precios de las matrículas universitarias.
Principales plataformas
Son muchísimas las plataformas que nos ofrecen la posibilidad de promocionarnos a “nosotros mismos”:
Go Fund Me: Fundada en mayo de 2010, se ha consolidado como una de las plataformas más importantes de este ámbito en EE.UU. Permite a las personas recaudar dinero para acontecimientos diversos: desde eventos, como fiestas y graduaciones; a situaciones difíciles, como accidentes o enfermedades.
Su modelo de trabajo es muy simple. Los usuarios tienen la posibilidad de crear su propio sitio web para describir la razón por la que están “recaudando” dinero. Durante este proceso, los usuarios definen la causa de su proyecto, la cantidad de dinero que esperan conseguir, e incluso pueden subir fotos y vídeos para describir su propósito. Una vez que se crea el sitio web, Go Fund Me permite a los usuarios compartir su proyecto con la gente a través de las redes sociales (Facebook, Twitter, etc…).
Cualquier persona puede donar la cantidad deseada a la causa de un usuario a través de la página web donde también se les permite dejar comentarios de apoyo. La plataforma cuenta con una sección especial para aquellos que están tratando de recaudar dinero para cubrir sus gastos de matrícula.
Pave: Esta plataforma también posee mucha importancia dentro del sector del crowdfunding de personas.
En ella, cualquier usuario puede publicar su perfil: quién es, cuáles son sus metas, el dinero que necesita para estudiar, etcétera… Esta información llega a una serie de “mecenas” que pueden invertir en la persona en concreto, con una suma de hasta 500 dólares. Estas personas no sólo aportan capital, sino que ayudan al usuario en concreto en su futura carrera, estableciendo ‘equipos’ con el estudiante. De este modo, los interesados ayudan a pagar los gastos de la carrera y cualquier otro tipo de costos que supongan alcanzar el éxito. A cambio, reciben un porcentaje de su futuro sueldo, que va del cinco al ocho por ciento, durante diez años.
Existen ocho proyectos con éxito entre los que encontramos a un futuro periodista, una futura directora de cine, un futuro ingeniero y un futuro pintor.
Give College y GradSave: Ambas plataformas poseen el mismo objetivo, que no es otro que permitir a las familias registrar a su hijo o hija nada más nacer para que cualquier interesado o amigo contribuya a pagar sus futuros estudios.
El equipo directivo de GiveCollege está formado por sus co-fundadores, Angela Merrill y Julie Lewin, ambas graduadas por la Universidad de Michigan.
Fue fundada en 2009, cuando Julie Lewin, madre de 3 niños menores en esa época, fue en busca de un regalo no tradicional para el cumpleaños de la hija de un amigo. Mientras contemplaba las pilas de los juguetes usados, decidió que quería hacer un regalo a largo plazo que resistiera el paso del tiempo. Quería contribuir al plan de ahorro universitario del niño.
GradSave, fundada en 2011 por Marcos Cordero, trabaja en la misma línea. El objetivo principal según palabras del propio equipo de trabajo, no es otro que cambiar la forma de pensar cuando realizamos un regalo destinado a niños de 0 a 6. La mayoría de las veces se opta por los mismos regalos (juguetes, ropa, etc). GradSave hace que sea fácil para la gente dar un regalo más significativo que realmente repercuta en el futuro del niño.
Campus Slice: A través de esta plataforma, los estudiantes o sus padres crean lo que la web denomina “Fondo de Educación”.
Ellos calculan su objetivo de financiación e invitan a amigos y familiares para contribuir con pequeñas cantidades mensuales, hasta el momento en el que se gradúan. Las pequeñas donaciones de entre 5 o 10 dólares suponen una ayuda bastante notable para poder costearse los libros de la carrera o cualquiera material adicional que les haga falta.
Lumni: Esta plataforma se ha consolidado como el portal de crowdfunding de personas más importante de Latinoamérica.
La compañía diseña y gestiona los fondos sociales que deciden invertir en la educación de los estudiantes. A cambio, cada estudiante se compromete a pagar un porcentaje fijo de los ingresos durante 120 meses después de su graduación. La obligación del estudiante se completa al final de ese período, independientemente de la cantidad pagada hasta la fecha.
Lumni opera en la actualidad en Chile, Colombia, México y Estados Unidos, y ha obtenido compromisos de unos 15 millones de dólares pertenecientes a unos 100 inversores.
Hola, en este artículo intentamos explicarlo, saludos